Últimamente estoy recibiendo bastantes emails con dudas y preguntas acerca de cómo empecé a establecerme como fotógrafa y a convertir la fotografía, hasta entonces mi hobby, en mi profesión y en mi manera de pagar mis facturas. Me ha parecido que era un tema sobre el que muchos de vosotros teníais curiosidad, por lo que he decidido hablar sobre ello aquí en el blog, para que esté al alcance de cualquiera a quien le interese conocer un poco más sobre el tema. En un principio pensaba resumir todo en un único post, pero me puse a escribir y vi que iba tomando forma y que era tan largo que he decidido convertirlo en una serie que ir actualizando semana a semana.
Una de las cosas más importantes, por no decir la única, en la que se fija un cliente a la hora de invertir en tus servicios es en tu portfolio. La fotografía es una profesión en la que los títulos que tengas o dónde hayas estudiado no son datos tan importantes como la calidad de tu trabajo. Es tu portfolio, y no tu currículum, el que va a ayudar a un cliente a decidirse por ti para capturar su boda o a su familia, por lo que es muy importante que esté cuidado y actualizado, que incluya variedad y que hable de ti y de tu trabajo de manera positiva. Si quieres establecerte como fotógrafo profesional, el primer paso que tienes que dar es reunir un portfolio profesional que poder mostrar en tu web. (De hecho, para mí es tan fundamental que el portfolio ocupe una parte importante de la web que estoy organizando una mudanza de web para poder mostrar mis fotografías mejor, que mi web actual falla bastante en eso!).
DEFINE TU NICHO DE MERCADO
Un nicho de mercado es, en pocas palabras, un sector de la población en el que tú, como profesional, te especializas y a quien vas a intentar vender tus servicios. En fotografía, algunos de los nichos más comunes son las bodas, los bebés, las familias…El estilo de fotografía en cada uno de estos casos es diferente, y lo mismo sucede con el marketing y otros factores relevantes.
Para tus clientes potenciales, esto importa mucho: no puedes enseñarle a alguien que quiere que fotografíes a su bebé tus fotos de paisajes, por muy buenas que sean, y pretender que te contrate. Como es lógico, querrá ver tus fotos de bebés antes de decidirse por ti y no por otro fotógrafo. Cada clase de fotografía tiene sus dificultades y su manera de funcionar, y que tú seas muy bueno fotografiando paisajes no significa que vayas a saber fotografiar a un bebé, porque la técnica es diferente: no sólo la manera de hacer fotos cambia, sino también la manera de comportarse. Tu cliente querrá saber que eres capaz de calmar al bebé, que sabes adaptarte a sus ritmos y aprovechar los momentos de paz…
Con esto no quiero decir que sólo puedas dedicarte a una clase de fotografía; yo, sin ir más lejos, hago bodas, familias, bebés y hasta producto. Puedes fotografiar lo que te apetezca, pero antes de que nadie te pague por ello, debes crear un portfolio profesional sobre ello trabajando gratis.
REGALA SESIONES A AMIGOS Y FAMILIARES
Ésta es la manera más sencilla de conseguir fotografías para tu portfolio: regala sesiones a gente con la que tengas confianza. Si quieres especializarte en bebés, busca un amigo o familiar que haya sido padre recientemente; si quieres fotos de pareja, pregúntale a tu mejor amiga y su novio si posarían para ti… La primera sesión de familia que yo hice se la regalé a unos amigos de Luis que tenían una niña de un año. Es un acuerdo perfecto, porque ellos consiguieron fotografías gratis y yo pude utilizar sus imágenes para empezar a construir mi portfolio profesional.
A veces, sobre todo con la familia, estas sesiones pueden volverse un poco incómodas si sientes que no te toman en serio o que, precisamente por la confianza que os tenéis, es difícil que tu sujeto pose sin partirse de risa, por ejemplo. Prueba con gente que conozcas pero con la que tengas menos confianza, para evitar estos problemas, y piensa que todo te sirve, que todas las experiencias las podrás aprovechar más adelante cuando trabajes con clientes reales. Hay gente que, cuando está enfrente de una cámara, se pone nerviosa y se ríe incontrolablemente (¡a mí me pasa!) y es bueno que ya te haya sucedido antes para saber cómo reaccionar y desarrollar estrategias que te permitan reconducir la sesión al punto en el que la quieres.
(Es importante que tu sujeto firme una cesión de derechos de imagen siempre, sea quien sea, da igual la confianza que tengáis. Hazme caso, siempre. Puedes descargar el documento de cesión de derechos que utilizo yo en la Biblioteca de Recursos, a la que puedes acceder suscribiéndote a mi newsletter aquí.)
ORGANIZA SESIONES TFP
Si las sesiones con tu círculo más cercano no te convencen o ya has hecho tres o cuatro y ahora te apetece pasar a algo un poco más complicado, las sesiones TFP son una buena idea. Puedes averiguar más sobre ellas en este post y, aunque en él hablé sobre todo de moda y fotografía artística, también pueden utilizarse para elaborar un portfolio profesional.
La sesiones TFP son especialmente útiles si en tu entorno no puedes encontrar a nadie que cumpla las características de tu nicho a quien fotografiar. Cuando decidí empezar a fotografiar bodas, me encontré con que no tenía nada de portfolio del estilo y de que no conocía a nadie que fuera a casarse pronto. Sabía que para que una novia decidiera contratarme para fotografiar su día especial, tenía que ser capaz de enseñarle algún trabajo mío de ese estilo, así que me puse en contacto con dos modelos, los vestí de novios y los llevé a una localización donde pudimos hacer algunas fotos de temática de bodas que yo pudiese utilizar en mi portfolio.
Como ves, son fotos bastante posadas, no tan espontáneas como las que me gustan y las que suelo hacer, pero teniendo en cuenta que ambos se conocieron el día de la sesión...
REGALA SESIONES EN REDES SOCIALES A DESCONOCIDOS
Ésta es una gran manera de ir creando tu portfolio profesional y, además, ir ganando experiencia y seguridad en ti mismo. Al tratarse de gente desconocida, puedes tomarte la sesión como un ‘’simulacro’’ de sesión con clientes reales, lo que te permitirá habituarte al ritmo de una sesión real, desarrollar estrategias específicas para que los clientes se relajen, averiguar cuáles son los problemas habituales que pueden surgir y cómo solucionarlos…
Además, si las personas a las que fotografías quedan contentas con tu trabajo, hablarán de ti a sus amigos y familiares, y puede que eso te lleve a conseguir tus primeros clientes reales. En mi caso, entre el 30 y el 40 por ciento de las sesiones que hago me vienen gracias a recomendaciones de clientes pasados que quedaron satisfechos con el trato y las imágenes, por lo que merece la pena trabajar bien, ser agradable y satisfacer las necesidades del cliente para que quede contento y te recomiende.
Una buena manera de hacer esto es publicar un post en Facebook, un tuit o una foto en Instagram explicando que estás buscando a desconocidos que cumplan X característica (tener un bebé de menos de tres meses, por ejemplo) y que quieran tener algunas fotos gratis a cambio de que tú puedas utilizarlas en tu portfolio. Es importante que quede claro que las imágenes vas a utilizarlas como quieras en tus redes sociales, para que no haya malentendidos ni malos rollos más adelante. (¡Firma la cesión de derechos!) Puedes pedir a tus amigos que compartan tus publicaciones con sus propios amigos, para poder llegar a gente a la que tú no conoces personalmente.
OFRÉCETE COMO SECOND SHOOTER O ASISTENTE
Hay cosas, como las bodas, que es bueno experimentar de primera mano antes de atreverte a coger tus propios clientes. Aunque hayas montado una sesión TFP o hayas aprovechado el vestido de novia de tu madre para hacerle fotos a tu hermana y a su novio, es importante que tengas la experiencia de primera mano de cómo funciona todo, qué momentos son los más importantes, dónde colocarte…
Para eso es buena idea que te pongas en contacto con fotógrafos más experimentados y te ofrezcas a trabajar gratis para ellos a cambio de que te permitan acompañarlos a una boda u otro evento para verlos trabajar. Yo misma me puse en contacto con fotógrafas con más experiencia que yo para esto mismo, pero nadie me permitió que le acompañara a una boda, supongo que porque formar a alguien que más adelante será tu competencia no es plato de gusto para nadie. Pero siempre es bueno preguntar, ¡y a lo mejor tú encuentras a alguien experimentado que te haga el favor!
¡Ahora ya puedes ponerte a fotografiar como loco para reunir tu portfolio! En la próxima entrega de esta serie voy a hablar sobre tu página web: cómo montarla, qué plataformas puedes utilizar y cuáles recomiendo, qué contenido incluir... Como siempre, si tienes alguna pregunta sobre el tema puedes escribirme durante esta semana a hello@juliapuig.com para asegurarte de que la respondo en el post!
¿Y tú, cómo montaste tu primer portfolio cuando aún no tenías clientes?
Lo de segunda cámara de bodas es una buena idea pero es verdad que ellos pueden estar celosos que luego el dia de mañana les quites el trabajo jeje
ResponderEliminarClaro, yo creo que ese es el motivo principal... pero cada uno tenemos un estilo y no a todos los novios les gustan las mismas fotos! Pero bueno, supongo que lo entiendo en cierto modo!
Eliminar¡Hola, Julia! No sabes cómo de agradecida te estoy por estas últimas entradas. ¡Me encantan! Están resultándome muy inspiradoras e ilustrativas de lo que voy a tener que ir haciendo. Seguiré leyéndote, porque tengo un interés muy grande por saber todo acerca de cómo llevar a cabo mi "carrera" como fotógrafa. Un saludo. Tu blog cada día me gusta más :)
ResponderEliminar¡Qué bien María! No sabes cuantísimo me alegro! Espero que te sigan siendo súper útiles, y si tienes cualquier duda concreta ya sabes que me puedes escribir para que le dedique un post!
EliminarHola Julia! Primero: Muy buen post, super útil. Segundo: me gustaría saber cómo o por qué webs o plataformas contactaste con fotógrafos experimentados, o cómo encontraste los blogs de esos fotógrafos. Muchas gracias :D
ResponderEliminar¡Gracias Gianfranco! En la cuenta de Instagram de cualquier fotógrafo puedes encontrar acceso a su website o a su blog :) Yo sigo a muchísimos fotógrafos a los que admiro, así que no me fue difícil! Besos!
EliminarLo que nos van a ayudar tus últimas entradas... Mil gracias por enseñarnos y hablarnos de todo esto Julia! :)
ResponderEliminar¡Gracias a ti por leer, Cris! Me alegro mucho de poder ayudar <3
EliminarQué ganitas de que publiques la segunda parte! Muchas gracias por todo lo que aportas, me resulta muy útil!
ResponderEliminar¡Gracias Ligia! No sabes cuánto me alegro de que te sirva lo que comparto por aquí! :)
Eliminar¡Muchas gracias Julia por estas entradas!
ResponderEliminarYo soy una de esas personas de los mil correos (jajaja) así que me gusta que hayas decidido crear esta sección :)
¡Gracias a ti Ester! Espero poder ayudarte mejor por aquí, que en los correos resumo mucho porque si no no puedo responderlos todos! :(
EliminarHola Julia!
ResponderEliminarUna gran idea crear esta serie de entradas, estoy deseando que publiques la segunda parte, que es en la que me encuentro yo ahora!
Muchas gracias por estas pautas :)
¡Gracias Verónica! Espero que la segunda parte te ayude mucho! :)
EliminarMil besos <3
Una preguntita, quería acceder al documento de cesión de derechos para echarle un vistazo pero no sé cómo acceder a la Biblioteca de recursos aunque estoy suscrita :/
ResponderEliminarEl link de acceso está en el email de bienvenida que recibiste cuando te diste de alta como suscriptora :) revisa tu bandeja de entrada y, si no lo encuentras, me escribes y te doy acceso manualmente!
Eliminar¡Ahora mismo estoy en este paso, ¡crear portfolio! A mi me gusta la fotografía de mascotas y he contactado con protectoras para colaborar con fotos, así me sirve como experiencia. Me gustaría hacer de asistente de alguien que me enseñara pero por la razón que expones no me atrevo a dar el paso de preguntar ja ja
ResponderEliminar¡Es muy buena idea Silvia! Además, así puedes ayudar a que adopten antes a los animalitos... Es algo que yo también me he planteado hacer muchas veces, ¡ya me contarás qué tal!
EliminarEn cuanto a lo de ser asistente, mi consejo es que pruebes.. ¡no pierdes nada! El no ya lo tienes :)